GB.270/ESP/1/2 |
Comisión de Empleo y Política Social |
ESP |
PRIMER PUNTO DEL ORDEN DEL DIA
Seguimiento de la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Social
b) Evaluaciones de la OIT en el plano nacional:
modalidades e informe sobre el estado de las labores
1. Durante la reunión de marzo de este año, la Comisión pidió a la Oficina que realizara un cierto número de evaluaciones de las políticas de empleo en el plano nacional en una muestra determinada de países con arreglo a las modalidades establecidas en el informe que fue sometido a la Comisión en marzo de 1996(1) . Ese informe subraya que las evaluaciones por países deben, en primer lugar, considerar un conjunto de cuestiones y políticas fundamentales. En efecto, no sólo se trata de las preocupaciones de política que compartan los países, sino además de que esas políticas deben reflejar valores universales tales como la aplicación de procedimientos democráticos en la toma de decisiones, velar por el respeto de los derechos fundamentales de los trabajadores y sus familias, la libertad sindical y el derecho de negociación colectiva. Además, deben respetarse las directrices contenidas en los convenios internacionales de trabajo pertinentes. Las evaluaciones por países, también, deberían prestar mucha atención no sólo al crecimiento del empleo sino también a la elevación de la calidad del empleo disponible. Esto incluye cuestiones relacionadas con el medio ambiente de trabajo, el nivel de empleo y la remuneración así como también las medidas que garanticen a todos el acceso, en un pie de igualdad, a un empleo adecuado. La mejora de la empleabilidad de los grupos desfavorecidos es una alta prioridad.
2. Si bien la estructura de cada evaluación estará evidentemente guiada por las principales cuestiones de política y preocupaciones de los países respectivos, las evaluaciones por países tendrán que considerar un amplio conjunto de parámetros a fin de proporcionar:
i) coherencia y uniformidad con respecto al tercer compromiso de la Declaración de Copenhague;
ii) perfiles comparables de las cuestiones consideradas y de las políticas relacionadas con esas cuestiones;
iii) reflejar valores universales.
Estos amplios parámetros comunes incluyen el examen del grado en el que los objetivos de empleo se articulan en la legislación pertinente y las políticas de gobierno declaradas, el modo en que estos objetivos se integran en las decisiones políticas, y una evaluación de las nuevas características y cuestiones relativas a la situación del desempleo y la pobreza, los mercados del empleo y los ingresos. El análisis de las políticas tendentes a lograr el pleno empleo examinará el marco de la política actual en relación con el fomento de la calidad del empleo y la calidad de los puestos de trabajo. Este análisis debería aportar ciertas aclaraciones acerca de las cuestiones y las consideraciones fundamentales. Asimismo, se evaluará el grado de amplitud del diálogo social y de la aplicación de procedimientos democráticos en la toma de decisiones, subrayando las responsabilidades fundamentales que deben asumir el Estado y los copartícipes sociales para enfrentar los cambios.
3. Tal como se debatió en el Consejo de Administración, las evaluaciones por países se realizarán con el consentimiento pleno de los países. Los principales requisitos previos son que los ejercicios de evaluación deberían basarse en un firme compromiso político y realizarse en estrecha colaboración y con la participación de las autoridades públicas y los copartícipes sociales. Después de terminado el ejercicio de evaluación, se organizará una cumbre nacional tripartita sobre el empleo para dar publicidad a la evaluación y anunciar un conjunto de recomendaciones para la acción nacional. Un informe marco que detalla las modalidades y los temas, tal como fueron establecidos en el informe presentado en marzo de 1996, fue elaborado por la Oficina a fin de proponer directrices para realizar las evaluaciones por países.
4. En septiembre de 1997, el avance del trabajo en los países participantes era el siguiente:
5. En Ucrania la evaluación está planificada como una consecuencia de la Conferencia nacional tripartita sobre políticas de empleo prevista para octubre de 1997. Se prevé que la Conferencia tripartita determinará las cuestiones específicas relativas al empleo y la política laboral mientras que la evaluación desarrollará posteriormente una estrategia coherente. Los grandes temas que serán considerados en primer lugar incluyen las políticas y las instituciones del mercado del empleo, la privatización, la reestructuración de las industrias específicas (incluidas la minería y la defensa), los problemas regionales de empleo y la información laboral de cada región. La OIT presta ayuda en la preparación de los documentos de referencia. Se celebraron discusiones con el Gobierno, la Federación de Sindicatos y la Unión de Industriales y Empresarios. En Brasil, se están terminando los estudios de referencia para la evaluación. Esta se centrará en la relación entre las tendencias macroeconómicas y la calidad del empleo y examinará el marco institucional del mercado del empleo. Asimismo, examinará políticas específicas y también la mejora de los mecanismos de distribución de los beneficios del crecimiento y la modernización. Las políticas establecidas para fomentar la productividad y los ingresos, y para mejorar la calidad de vida de los trabajadores menos favorecidos serán revisadas con miras a formular las recomendaciones que sean necesarias para mejorarlas.
6. El Programa y Presupuesto para el bienio 1998-1999 contiene propuestas para realizar ocho a diez evaluaciones por países; la selección de los países se basará en consideraciones relativas al equilibrio regional y los niveles de desarrollo. La selección dependerá, en última instancia, del consentimiento del gobierno interesado. Se espera que estas evaluaciones por países aporten informaciones importantes para la preparación del informe de la Oficina que se someterá a la consulta internacional sobre el seguimiento de la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Social propuesta para 1999.
Ginebra, 14 de octubre de 1997.