Trabajadoras por cuenta propia, pilares de la reactivación económica en Bolivia

Daniela Barrientos y Sandy Mena han hecho frente al impacto de la pandemia en la economía del país, trabajando. Con apoyo de Naciones Unidas han logrado despegar sus negocios, fortalecer sus capacidades empresariales e incrementar sus ingresos.

Noticia | 10 de marzo de 2022

La Paz — En Bolivia, el 80% de las personas trabaja en la informalidad. El 87% de estas personas son mujeres y, de este porcentaje, 4 de cada 10 desempeñan sus actividades por cuenta propia.

Esta situación se vio exacerbada con la llegada de la pandemia en 2020: la destrucción de puestos de trabajo impulsó a muchas mujeres a emprender, incluso de forma informal, en actividades vinculadas a manufactura, comercio, restaurantes y servicios.

Daniela Barrientos

Este es el caso de Daniela Barrientos, maquilladora profesional de la ciudad de La Paz, a quien la falta de oportunidades para acceder al mercado laboral la llevó a desarrollar su propio negocio: clases de maquillaje online.


Emprender es algo muy difícil. Como es tu propio negocio, tú misma tienes que ser la community manager, la gerente, la mensajera y la secretaria. Todo sin dejar de ser esposa y madre.

Daniela Barrientos, maquilladora profesional

"Al inicio de la pandemia nos costó mucho. Mi esposo no tenía trabajo y yo no estaba certificada para dictar clases a través de internet", comenta Daniela.

La llegada de la COVID-19 cambió por completo el mundo del trabajo. Daniela entendió que, si quería salvar sus aspiraciones y hacer crecer su emprendimiento, tenía que introducirse en un mundo cada vez más digital.

Así como Daniela, muchas mujeres en Bolivia se enfrentaron a este desafío. Se estima que, al 2020 (INE), alrededor de 42% de mujeres a nivel nacional no utilizaba internet, un 31% no disponía de teléfono celular para uso propio, y el 23% no había utilizado celular en los últimos tres meses.

Frente a esta situación, Despega tu negocio, Programa Conjunto de las Naciones Unidas en Bolivia, desarrolló las capacidades y habilidades de mujeres como Daniela para emprender y desenvolverse adecuadamente en el mundo digital, contribuyendo a la recuperación de sus medios de vida, incrementando la productividad y competitividad de su emprendimiento y promoviendo, así, su tránsito hacia la formalidad. 

"Las mujeres trabajadoras por cuenta propia, sobre todo aquellas que se ven en la necesidad de iniciar su negocio de manera informal, suelen encontrarse poco familiarizadas con lo digital, y por consiguiente, sentirse excluidas de esta nueva revolución en el mundo del trabajo", advierte John Bliek, especialista en empresas, cooperativas y desarrollo rural de la OIT.


Cuando escuché de Despega tu negocio fue lo mejor. La verdad es que estoy aprendiendo mucho cada día, y ahora siento que tengo los conocimientos necesarios para poder empezar mi propio negocio. A partir de ahora solo voy hacia adelante.

Daniela Barrientos, maquilladora profesional

Con el apoyo del Programa Conjunto, Daniela no solo ha logrado iniciar un nuevo negocio, sino que también se ha acercado a diferentes herramientas digitales que le permiten promocionar su trabajo para atraer nuevos clientes.

"No todas las mujeres participaron en las mismas condiciones. Existen brechas en cuanto al género y la edad que limitan el aprovechamiento de las oportunidades vinculadas al acceso a internet y la utilización de tecnologías de la información y la comunicación", explica Alexander Conesa-Pietscheck, coordinador del Programa Conjunto para la OIT.



Las participantes recibieron acompañamiento y capacitación en gestión de ventas y atención al cliente, fotografía, diseño y elaboración de contenido para redes sociales. Asimismo, se implementaron planes de acción estratégicos en marketing digital a través de sesiones de coaching para mejorar los procesos de promoción y comercialización de los negocios de las mujeres participantes.

"Estos talleres tienen como objetivo apoyar a que mujeres como Daniela se formalicen e incrementen su productividad, de modo que puedan crear más y mejores empleos para ellas y su comunidad", asegura Bliek, especialista de la OIT.

Sandy Mena

Sandy Mena tomó la decisión de iniciar su propio negocio de manualidades desde casa para no descuidar la crianza y educación de sus hijos. Para ella, su emprendimiento es más que un negocio: es una forma de garantizar una fuente de ingresos para su hermana, que hoy es también personal contratado de su emprendimiento.


Decidí emprender para poder dedicarme al cuidado de mis niños [...] y considero que mi emprendimiento aporta a la economía boliviana porque ahora trabajamos en esto mi hermana y yo.

Sandy Mena, emprendedora

Según el último Panorama Laboral de OIT, de todo el empleo perdido a consecuencia de la pandemia, aún falta recuperar algo más de 4,5 millones de puestos de trabajo en América Latina y 4 millones de ellos estaban ocupados por mujeres. Fomentar la participación de las mujeres en el mercado laboral es fundamental para mitigar los impactos socioeconómicos causados por la COVID-19 y contribuir a cerrar la brecha de empleo entre mujeres y hombres.


El programa Despega tu negocio me está ayudando bastante, sobre todo en el manejo de redes sociales y en las actividades de marketing de mi emprendimiento. Desde un inicio empecé a publicar fotos y videos de mis productos en Facebook e Instagram, y hoy ya estoy viendo resultados en las ventas.

Sandy Mena, emprendedora

Daniela y Sandy, junto con otras 300 mujeres cuentapropistas participantes de Despega tu negocio, cuentan con las herramientas necesarias para afrontar la revolución digital que hoy caracteriza el mundo del trabajo. A través del fortalecimiento de su competitividad y resiliencia, se espera que estas mujeres y sus negocios sean el rostro de la recuperación del empleo en sus comunidades.