Los mejores años del café en Colombia y los retos de sus caficultores en materia laboral
Estudio sobre condiciones laborales del sector cafetero en Colombia revela los desafíos que enfrentan caficultores en materia de seguridad y salud en el trabajo.
Bogotá - El mercado del café en Colombia cerró en el 2020 como uno de los años mejores pagos, con 13,9 millones de sacos de 60 kilos de café verde producidos por un valor de alrededor de 9 billones de pesos, posicionando una vez más al sector cafetero como uno de los principales motores económicos del país, en especial, durante el tiempo de pandemia. La Federación Nacional de Cafeteros estima que para este 2021, Colombia producirá más de 6 millones de sacos de café en el primer semestre del año y que se seguirá posicionando como el tercer país productor y exportador después de Brasil y Vietnam.
A pesar de la alta demanda en mano de obra que representa este buen momento del sector cafetero que, para este 2021 representará el trabajo de 137 500 recolectores, y de ser la fuente de ingresos económicos para más de medio millón de familias cafeteras en todo el territorio nacional, aún existen grandes retos en materia de seguridad y salud en el trabajo, en especial, los trabajadores temporales o estacionales quienes son mayormente informales y, por tanto, no cuentan con toda la protección requerida.
En respuesta, la OIT, en cooperación de la Unión Europea (UE) a través del Fondo Visión Cero, elaboraron un estudio que permitió caracterizar y tipificar las condiciones de salud y de trabajo de 625 caficultores que realizan actividades temporales, en tres de los principales departamentos cafeteros del país, Antioquia, Caldas y Risaralda. Esto permitió ahondar en las problemáticas identificadas en estudios previos realizados por la OIT en los que se evidenció que esta población es vulnerable.
En el estudio denominado “Condiciones de trabajo y de salud de las personas que realizan actividades temporales o estacionales en cultivos de café”, se advierte sobre los desafíos que aún persisten en materia de desconocimiento sobre el Sistema General de Riesgos Laborales (SGRL) y sus beneficios, el uso adecuado de Elementos de Protección Personal (EPP) en el trabajo e información general sobre Seguridad y Salud en el Trabajo (SST).
De los caficultores encuestados, 2 de cada 10 trabajadores temporales reciben en sus lugares de trabajo máscaras, caretas o guantes y sólo 1 de cada 10 recibe otro tipo de elementos de protección personal como overoles, gafas, botas o gorras. El 23,4 % de la población afirma haber recibido capacitaciones sobre Seguridad y Salud en el Trabajo (SST) y manejo de Elementos de Protección Personal (EPP). La mitad de los trabajadores tiene acceso a elementos de primeros auxilios para situaciones de emergencia como botiquines, medios de transporte, extintores, entre otros.
El 70,7 % de estos trabajadores tienen cobertura de salud a través del régimen subsidiado, sin embargo, sólo el 3,4 % de los trabajadores están afiliados a una Aseguradora de Riesgos Laborales (ARL), el 6,1 %, a un Fondo de Pensiones (AFP) y el 1,3 % a los Beneficios Económicos Periódicos (BEPS). Entre otras cifras que revela el estudio completo.
Mientras el país se alista para la primera cosecha del año, ¿cómo afrontar estos retos?
El estudio propone algunas recomendaciones para mejorar la seguridad y salud de los trabajadores cafeteros temporales o estacionales a través de estrategias articuladas en las que participen diferentes agentes como autoridades competentes, empleadores, organizaciones y los propios trabajadores, entre otros.
Como primera medida, se recomienda replicar estudios de este tipo en los demás departamentos productores de café, como Huila, Tolima y Nariño. Para ello, el estudio brinda una herramienta gratuita y abierta para la caracterización de las condiciones de salud y del trabajo de la población, la cual está siendo adaptada para replicarse en otras cadenas de valor del sector agrícola a nivel mundial.
Esta información permitirá orientar la toma de decisiones, la definición de medidas de prevención y la creación de planes de intervención en seguridad y salud en el trabajo.
A pesar de la alta demanda en mano de obra que representa este buen momento del sector cafetero que, para este 2021 representará el trabajo de 137 500 recolectores, y de ser la fuente de ingresos económicos para más de medio millón de familias cafeteras en todo el territorio nacional, aún existen grandes retos en materia de seguridad y salud en el trabajo, en especial, los trabajadores temporales o estacionales quienes son mayormente informales y, por tanto, no cuentan con toda la protección requerida.
En respuesta, la OIT, en cooperación de la Unión Europea (UE) a través del Fondo Visión Cero, elaboraron un estudio que permitió caracterizar y tipificar las condiciones de salud y de trabajo de 625 caficultores que realizan actividades temporales, en tres de los principales departamentos cafeteros del país, Antioquia, Caldas y Risaralda. Esto permitió ahondar en las problemáticas identificadas en estudios previos realizados por la OIT en los que se evidenció que esta población es vulnerable.
En el estudio denominado “Condiciones de trabajo y de salud de las personas que realizan actividades temporales o estacionales en cultivos de café”, se advierte sobre los desafíos que aún persisten en materia de desconocimiento sobre el Sistema General de Riesgos Laborales (SGRL) y sus beneficios, el uso adecuado de Elementos de Protección Personal (EPP) en el trabajo e información general sobre Seguridad y Salud en el Trabajo (SST).
De los caficultores encuestados, 2 de cada 10 trabajadores temporales reciben en sus lugares de trabajo máscaras, caretas o guantes y sólo 1 de cada 10 recibe otro tipo de elementos de protección personal como overoles, gafas, botas o gorras. El 23,4 % de la población afirma haber recibido capacitaciones sobre Seguridad y Salud en el Trabajo (SST) y manejo de Elementos de Protección Personal (EPP). La mitad de los trabajadores tiene acceso a elementos de primeros auxilios para situaciones de emergencia como botiquines, medios de transporte, extintores, entre otros.
El 70,7 % de estos trabajadores tienen cobertura de salud a través del régimen subsidiado, sin embargo, sólo el 3,4 % de los trabajadores están afiliados a una Aseguradora de Riesgos Laborales (ARL), el 6,1 %, a un Fondo de Pensiones (AFP) y el 1,3 % a los Beneficios Económicos Periódicos (BEPS). Entre otras cifras que revela el estudio completo.
Mientras el país se alista para la primera cosecha del año, ¿cómo afrontar estos retos?
El estudio propone algunas recomendaciones para mejorar la seguridad y salud de los trabajadores cafeteros temporales o estacionales a través de estrategias articuladas en las que participen diferentes agentes como autoridades competentes, empleadores, organizaciones y los propios trabajadores, entre otros.
Como primera medida, se recomienda replicar estudios de este tipo en los demás departamentos productores de café, como Huila, Tolima y Nariño. Para ello, el estudio brinda una herramienta gratuita y abierta para la caracterización de las condiciones de salud y del trabajo de la población, la cual está siendo adaptada para replicarse en otras cadenas de valor del sector agrícola a nivel mundial.
Esta información permitirá orientar la toma de decisiones, la definición de medidas de prevención y la creación de planes de intervención en seguridad y salud en el trabajo.