Tendencias Mundiales del Empleo 2005 Informe sobre el Empleo en el Mundo: en 2004, ligero crecimiento del empleo, pero no suficiente
A pesar del sólido crecimiento económico, la situación mundial del empleo registró únicamente una ligera mejora en 2004, con variaciones marginales al alza y a la baja del empleo y el desempleo, respectivamente. El informe anual de la OIT Tendencias Mundiales del Empleo señala que la creación de empleo continúa siendo un gran desafío para los encargados de formular políticas.
GINEBRA - Indudablemente, el descenso en el desempleo mundial interanual que se ha producido en 2004 es, aunque leve, el primero desde el año 2000, y es la segunda vez que esta tendencia se manifiesta desde 1994. La notable tasa de crecimiento económico mundial del 5% alcanzada en 2004 desempeñó un papel fundamental en la consecución de estos resultados.
Sin embargo, el informe sobre las Tendencias Mundiales del Empleo ha puesto de relieve que el aumento en el número de puestos de trabajo creados en el mundo, que alcanzó los 47,7 millones, o un 1,7%, siguió siendo decepcionante, y que el empleo como proporción de la población en edad de trabajar permaneció prácticamente invariable en un 61,8% en 2004, respecto al 61,7% registrado en 2003.
"Es cierto que cualquier reducción en el desempleo es positiva, pero no debemos perder de vista que la creación de empleo continúa siendo un gran desafío para quienes toman parte en la definición de políticas", señaló Juan Somavía, Director General de la OIT. "En otras palabras, necesitamos contar con políticas enfocadas a la creación de empleo".
Datos por regiones
Las tendencias del empleo por región
mostraron que la reducción más acusada de
la tasa de desempleo se produjo en América
Latina y el Caribe, donde pasó de 9,3% en 2003
al 8,6% en 2004, mientras que la variación fue
más modesta en otras zonas del mundo.
En las economías del mundo desarrollado (incluida la UE-25) se produjo una disminución leve, del 7,4 al 7,2%. En Asia Sudoriental y en el Pacífico, la tasa de desempleo pasó del 6,5% en 2003 al 6,4% en 2004, mientras que en Asia Meridional la variación fue del 4,8 al 4,7%. La tasa no registró cambios en Asia Oriental, donde volvió a ser del 3,3%, y en la zona de Medio Oriente y África del Norte, donde fue del 11,7%. En cambio, en el África subsahariana, se produjo un leve aumento del 10,0 al 10,1% en el desempleo, pese a que en 2004 se registró una tasa de crecimiento del PIB del 4,4%.
El informe de la OIT destaca que además de crear nuevos empleos, otros retos fundamentales a los que se enfrentan los responsables de la formulación de políticas en la actualidad comprenden la eliminación de los "déficit" de trabajo decente donde quiera que éstos existan. Un descenso en el desempleo no es necesariamente un indicador de la mejora de estos "déficit" de trabajo decente, y representa tan sólo la punta del iceberg. En la mayoría de los países en desarrollo, "empleo" y "desempleo" son medidas reales del estado de los medios de vida y del bienestar de la población. En estos países, que carecen a menudo de mecanismos de seguro de desempleo efectivos, la mayoría de las personas, sencillamente, no se puede permitir permanecer en el paro. Por ejemplo, de los más de 2.800 millones de trabajadores en el mundo, casi la mitad sigue sin ganar lo suficiente para situarse ellos mismos y sus familias por encima del umbral de pobreza de dos dólares al día. De estos pobres que trabajan, 535 millones viven con sus familias en condiciones de extrema pobreza, con menos de 1 dólar al día. Por tanto, el objetivo de las políticas no debe consistir únicamente en el desempleo, sino también en las condiciones de trabajo ( Nota 1). En este sentido, en el informe se abordan aquellos aspectos que requieren una atención inmediata y una respuesta sostenida de los gobiernos, los organismos internacionales y la sociedad civil:
- en primer lugar, la catástrofe del tsunami en Asia, acaecida el 26 de diciembre, ha dejado a su paso a cientos de miles, o quizás millones, de personas que, además de sufrir pérdidas personales inimaginables, se encuentran ahora despojadas de sus medios de vida y corren el riesgo de caer en una extrema pobreza si no se restauran sus empleos e ingresos;
- en segundo lugar, la epidemia del VIH/SIDA que, de acuerdo con las estimaciones de la OIT, provocará el fallecimiento de 3,2 millones de personas en edad de trabajar en todo el mundo en el transcurso de este mismo año (2005), exige que se preste atención prioritaria a su repercusión en el mercado de trabajo y a la atenuación de los efectos económicos y sociales;
- en tercer lugar, la globalización genera tanto oportunidades como retos para los trabajadores de todo el mundo. Las medidas adoptadas en el marco de las políticas comerciales globales en 2005, como las que atañen al intercambio de productos agrarios entre economías en desarrollo y desarrolladas, tendrán probablemente consecuencias de importancia para los trabajadores de todas las regiones;
- en cuarto lugar, la tendencia a la utilización de trabajadores externos en los sectores de la manufacturación y en los servicios que operan tanto fuera (outsourcing), como dentro (insourcing) de las instalaciones de las empresas plantea retos relacionados con el mercado de trabajo tanto en las economías en desarrollo, como en las desarrolladas;
- en quinto lugar, los déficit actuales de trabajo decente en una economía informal creciente en numerosos países en desarrollo subrayan la necesidad de establecer como objetivo específico la mejora de las condiciones de trabajo y la creación de más y mejores oportunidades de empleo en la economía formal;
- por último, en 2005el importante problema del desempleo de los jóvenes sigue siendo tan relevante como siempre, sobre todo en las regiones marcadas por los conflictos civiles.
En resumen, el mundo ha de hacer frente el próximo año a graves desafíos y de gran diversidad en materia de empleo. El informe sobre las Tendencias Mundiales de Empleo examina con mayor detenimiento estas importantes cuestiones, que conformarán las políticas de mercado de trabajo a lo largo del próximo año.
Nota 1 - En posteriores trabajos de la OIT sobre esta materia se incorporarán indicadores del mercado de trabajo adicionales, como los relativos a la situación en el empleo y el empleo por sector. Estos indicadores son especialmente pertinentes para regiones en desarrollo, ya que miden el número de trabajadores por cuenta ajena y en sectores en los que puede predominar el empleo informal y el trabajo familiar no remunerado.