Mensaje del Sr. Juan Somavia, Director General de la Oficina Internacional del Trabajo con ocasión del Día Internacional de la Lucha contra el SIDA - 1.º de diciembre de 2007

Statement | Geneva | 29 November 2007

Para cumplir la promesa de cerrar el paso al SIDA, tomemos las riendas

En el día de hoy, la Campaña Mundial de Lucha contra el SIDA nos exhorta a centrarnos en la función de liderazgo que nos corresponde para que se cumpla la promesa de cerrar el paso al SIDA.

Cuantos han estado de alguna manera en relación con el VIH/SIDA saben por experiencia de los estragos que causa. En el mundo del trabajo hemos presenciado cómo ha ido destruyendo vidas humanas y familias enteras, además de entrañar la violación de derechos fundamentales, en particular mediante la discriminación contra los trabajadores seropositivos y la amenaza de que trabajen los niños cuyos padres contrajeron el SIDA. También hemos visto los terribles efectos que esta epidemia surte en las empresas y la economía en general, al provocar la pérdida de productividad y de trabajadores cualificados, amén de generar unos elevadísimos costes en términos médicos. La letal virulencia de la epidemia azota con mayor fuerza a la población adulta y productiva.

El compromiso de la OIT hunde sus raíces en nuestro objetivo, mundialmente refrendado, de fomentar el Trabajo Decente con base en los derechos en el trabajo, como el derecho a la libertad frente a la discriminación, el derecho a la ampliación de las oportunidades de empleo, el derecho de todos a una protección, y el derecho al diálogo social.

El lugar de trabajo es un cauce obligado para combatir el estigma, promover la prevención, y alcanzar a las víctimas para prestarles cuidados y apoyo.

El Repertorio de recomendaciones prácticas de la OIT sobre el VIH/SIDA y el mundo del trabajo ha resultado sumamente útil para combatir el VIH/SIDA en el lugar de trabajo.

Otra expresión del compromiso contraído en esta larga empresa por nuestros mandantes, o sea, por los gobiernos y las organizaciones de empleadores y de trabajadores, reside en su decisión de elaborar un instrumento legal sobre el VIH/SIDA.

Este se nutrirá del Repertorio de recomendaciones prácticas, cuyos principios reforzará, especialmente respecto del estigma y de la discriminación, y en aras de la contribución del lugar de trabajo para coadyuvar a un acceso universal a la prevención, la atención y el apoyo.

Conforme va creciendo la epidemia también ha de progresar la respuesta que debemos darle colectivamente. Con el tiempo, comprender que esta enfermedad es un obstáculo al desarrollo y motivo de crisis de la salud pública permitirá confirmar el protagonismo que realmente merece en el programa de desarrollo.

Ello ha permitido reconocer en mayor medida lo importante que es adoptar un enfoque integrado para afrontar la epidemia en sus dimensiones actuales. El VIH se propaga por las líneas de falla de la sociedad, cuyo relieve acentúa. La lucha contra la enfermedad debe ser también una batalla, librada en los campos nacional, regional y mundial, contra la desigualdad de género, de acceso a la educación y a la atención médica, y de oportunidades de obtener un trabajo decente.

Lograr un enfoque integrado requiere un esfuerzo aún más intenso, por lo que es tanto más imperativo contar con un liderazgo eficaz.

La OIT se compromete a cumplir su cometido en este empeño.