Conferencia Internacional del Trabajo
Llamamientos a una mayor acción en materia de desigualdades y cualificaciones ponen fin a la segunda sesión de la 109ª Conferencia Internacional del Trabajo
La segunda y última sesión de la 109ª Conferencia Internacional del Trabajo ha concluido con un llamamiento de los Estados miembros para que la OIT desarrolle nuevas estrategias para abordar las desigualdades e impulsar las competencias y el aprendizaje permanente.
La decisión se produjo en la clausura de la CIT de 2021, tras la adopción de dos conjuntos de conclusiones e informes, sobre Competencias y aprendizaje permanente y Desigualdades y el mundo del trabajo. Los documentos fueron elaborados por dos grupos de trabajo de la conferencia tripartita.
La estrategia sobre las desigualdades y el mundo del trabajo pretende ayudar a los Estados miembros de la OIT a acelerar la acción para reducir y prevenir las desigualdades en el mundo del trabajo y garantizar que nadie se quede atrás. Esto implica una acción combinada y coordinada en siete áreas: promover la creación de empleo; fomentar la igualdad de oportunidades; garantizar una protección adecuada para todos los trabajadores; acelerar la transición a la formalidad; garantizar la igualdad de género y la no discriminación, promover la igualdad, la diversidad y la inclusión; hacer realidad la protección social universal; y promover el comercio y el desarrollo para una globalización justa y una prosperidad compartida.
Los delegados pidieron a la OIT que se comprometa urgentemente a una mayor coordinación y colaboración multilateral en materia de desigualdad durante la recuperación de la crisis de COVID-19.
La Conferencia también adoptó una resolución en la que se pide a la OIT que desarrolle una estrategia y un plan de acción de la OIT coherentes, inclusivos y con perspectiva de género sobre las competencias y el aprendizaje permanente para 2022-30. Estas medidas deberían incluir el fortalecimiento de la labor de la OIT en el área, incluyendo la mejora de la creación de capacidades, los servicios de asesoramiento y el trabajo en proyectos; un mayor intercambio de buenas prácticas y conocimientos; la promoción de las normas internacionales del trabajo pertinentes; y la ampliación de las asociaciones y el compromiso con otras organizaciones, incluidas las instituciones financieras.
En su intervención en la sesión plenaria de clausura, el Director General de la OIT, Guy Ryder, describió la 109ª CIT como "diferente a cualquier otra en la larga historia de la OIT". La finalización con éxito del orden del día había "garantizado la integridad y la continuidad institucional de la OIT.... [y] demostrado que, sea cual sea la pandemia que se nos eche encima, y dure lo que dure, la OIT tiene los medios y, lo que es más importante, la determinación de salir adelante".
La Conferencia había "producido resultados muy sustanciales", dijo a los delegados, y describió el Llamamiento Mundial a la Acción para una Recuperación Centrada en el Ser Humano de la crisis de la COVID-19, adoptado en la reunión de junio de la CIT, como "un toque de atención político y una hoja de ruta para la OIT y sus mandantes".
"Una consecuencia inmediata, y creo que crucial, será la convocatoria del gran foro político multilateral a principios del próximo año, que ofrecerá una verdadera oportunidad estratégica para impulsar la coherencia de la acción del sistema internacional para la recuperación que tanto deseamos y que tanto necesitamos", añadió.
La sesión de noviembre de la CIT se celebró del 25 de noviembre al 11 de diciembre, con la acreditación de unos 4.900 delegados -que representaban a gobiernos, organizaciones de trabajadores y de empleadores- y observadores. Entre ellos se encontraban 157 ministros y viceministros y representantes de alto nivel de trabajadores y empleadores, procedentes de 181 Estados miembros de la OIT.
Al igual que la primera reunión de la 109ª CIT, celebrada en junio, la sesión de noviembre se celebró de forma virtual, por primera vez en la historia de la OIT. A pesar de estos cambios de formato, los delegados abordaron todos los puntos del orden del día de la conferencia.
El primer segmento de la Conferencia se celebró del 20 de mayo al 19 de junio. Incluyó una Cumbre de alto nivel sobre el Mundo del Trabajo, de dos días de duración, en la que los delegados adoptaron el Llamamiento Mundial a la Acción, que esboza medidas para crear una recuperación de la pandemia centrada en el ser humano. También se debatió sobre la protección social y el impacto de COVID-19.
Durante la sesión de junio, los delegados aprobaron una resolución de emergencia sobre la situación en Myanmar y votaron para adoptar el Programa y Presupuesto de la OIT para el bienio 2022-23 y el informe de la Comisión de Aplicación de Normas.
La 110ª reunión de la CIT está prevista del 30 de mayo al 10 de junio de 2022.