P: ¿Cómo percibe la opinión pública la migración en los países de la OCDE?

S. Kapferer: La opinión pública en los países de la OCDE más común es que la migración no puede ser controlada y es muy costosa. Las poblaciones nativas pueden sentir que las fronteras de los países de la OCDE no son seguras. Es posible que perciban que lo migrantes roban los empleos y que reciben una cantidad desproporcionada de beneficios sociales en los países de destino. Además, pueden pensar que el porcentaje de migrantes es demasiado alto, mucho más del porcentaje actual. Los partidos populistas alimentan y amplifican estos sentimientos y pueden influenciar las políticas y la legislación nacional sobre migración.

P: ¿Es esto cierto?

S. Kapferer: No, hay una diferencia entre la percepción y los hechos reales. Los migrantes pagan más impuestos y cotizaciones a la seguridad social de los beneficios que reciben. No roban empleos y no van a los países de la OCDE sólo para beneficiarse de las prestaciones sociales. Migran para escapar de la pobreza y para vivir en lugar seguro, pero también para crear riqueza en su nuevo país. Las falsas percepciones son algo que debemos combatir. Los medios de comunicación pueden desempeñar un papel al divulgar historias exitosas e informar al público sobre la situación real.

P: ¿Cuáles son las principales tendencias en relación a la migración en los países de la OCDE?

S. Kapferer: Durante la última década, el número de migrantes en los países de la OCDE ha aumentado de 40 por ciento. Hay 117 millones de migrantes en los 34 países de la OCDE, lo cual representa más de 10 por ciento de la población. Los factores detrás de esta tendencia son la globalización, la necesidad de una fuerza de trabajo joven, la internacionalización de la educación y el matrimonio entre diferentes nacionalidades. Otra tendencia interesante es que los migrantes están cada vez mejor capacitados y preparados, con un número creciente que ha finalizado los estudios superiores.

P: ¿Qué habría que hacer para contrarrestar las percepciones públicas negativas sobre los migrantes?

S. Kapferer: Es necesario sensibilizar a las instituciones políticas, los parlamentos y la opinión público. Debemos restablecer la confianza en las instituciones y en las políticas de migración. Se necesita un liderazgo firme para llevar a cabo una política de comunicación política eficaz. Debemos incentivar la integración en el mercado laboral. Necesitamos un debate público enriquecedor que abarque el concepto de Estado-nación, el acceso a la ciudadanía? Pregunta importante para nuestras sociedades.

P: ¿Qué puede hacer la OIT?

S. Kapferer: La OIT agrupa a los sindicatos, los empleadores y los gobiernos, cada uno de ellos tiene un papel que desempeñar. Con frecuencia, las personas menos calificadas están más preocupadas sobre los posibles efectos negativos de la migración. Los sindicatos pueden ayudar a informar a todos los trabajadores que los migrantes no están allí para robarles sus empleos. Los empleadores también tienen un importante papel que desempeñar al favorecer las prácticas comerciales y de contratación equitativas. Por supuesto, los gobiernos son responsables de mejorar las leyes, las políticas y los mecanismos de aplicación a fin de garantizar que estas prácticas sean implementadas.

La reunión fue organizada bajo los auspicios de Turquía que preside el FMMD y dirigida por México y Grecia.