Esta historia fue escrita por la Sala de Noticias de la OIT. Para ver las declaraciones y discursos oficiales de la OIT, por favor visite nuestra sección "Declaraciones y Discursos".

La prevención de la trata de niñas en China

En 2002, aproximadamente 94 millones de campesinos chinos emigraron en busca de trabajo. Esta afluencia de inmensas cantidades de trabajadores rurales ha aumentado las posibilidades de quienes tratan de explotar a los más vulnerables, es decir, los niños y las mujeres jóvenes. En abril de 2004, las autoridades de China y el Programa Internacional de la OIT para la Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC) pusieron en marcha un nuevo proyecto para prevenir el tráfico de niños y de jóvenes con fines de explotación laboral. Hans van de Glind, Consejero técnico principal (CTP) del proyecto, envió a OIT en línea el siguiente informe.

Artículo | 25 de noviembre de 2005

GUIZHOU, China (OIT en línea) - Muy lejos de los imponentes rascacielos del centro de Guangzhou, la provincia de Guizhou tiene el aspecto de una zona rural idílica. Sin embargo, el auge económico no está mejorando las condiciones de vida de todos los pobladores de las remotas aldeas rurales de China. Pueden parecer idílicas, pero son tremendamente pobres.

El año pasado, debido a la pobreza, a la falta de oportunidades de trabajo en las zonas rurales y a la creencia de encontrar oportunidades de trabajo en las ciudades, alrededor de 120 millones de personas se desplazaron dentro de China, la mayoría de ellas hacia la muy próspera costa este. Sin bien los hombres constituyen la mayoría de la fuerza de trabajo migrante, el porcentaje de mujeres está aumentando rápidamente, en particular entre las más jóvenes.

"Muchas niñas parten de las aldeas rurales a una edad muy temprana. Abandonan la escuela prematuramente, realizan tareas domésticas y se cansan de la vida rural. Muchas prueban suerte y se alejan de sus aldeas, sin ninguna preparación y mal informadas acerca de los peligros que corren o de los posibles tipos de protección... quedando así expuestas a la explotación laboral y sexual", explica Hans van de Glind, Consejero técnico principal del Proyecto para prevenir el tráfico de niñas y mujeres jóvenes con fines de explotación laboral dentro de China (CP-TING), de la OIT.

Xiaoqiu, una adolescente de 17 años de Guizhou, es una de ellas. Llegó a Guangzhou con el deseo de ganar más dinero. Después de haberse gastado casi todos sus ahorros sin conseguir un empleo, compró resignada un billete de tren para regresar a su pueblo de origen.

Como no tenía dinero para pagar un hotel, decidió pasar la noche en una plaza frente a la estación del ferrocarril. Un joven, que se presentó como Ouyang Jian, la convenció de ir a un hotel diciéndole que por la noche la plaza no era un lugar seguro para una adolescente.

Llevó a Xiaoqiu al hotel y, después de tomar unas copas, le robó sus pertenencias y luego la violó. Al día siguiente, la vendió a otro hombre llamado Luo Tao por 2.500 RMB (aproximadamente 300 dólares estadounidenses).

Luo Tao y otros dos hombres violaron a Xiaoqiu y después la obligaron a prostituirse amenazándola con una inyección mortal. Una semana más tarde, Xiaoqiu logró escapar. Inmediatamente, fue a presentar una denuncia a la policía de la estación del ferrocarril de Guangzhou. La policía detuvo a los sospechosos y rescató a más de diez niñas - la más joven menor de 15 años.

Por una migración segura

El proyecto CP-TING tiene por objeto lograr que las jóvenes que quieran dejar sus aldeas rurales puedan emigrar en condiciones seguras. El proyecto se centra en las adolescentes y las mujeres jóvenes a las que pone en contacto con empleadores decentes que les ofrecen empleos decentes. El proyecto, cuyo enfoque se basa en la prevención, gira en torno a la promoción de la autonomía y la educación en las zonas de origen, y a los servicios de colocación y la mejora del entorno migratorio en las provincias de emigración y de inmigración.

El proyecto opera en tres provincias de "emigración" de China central (Anhui, Henan y Hunan) que tienen una población total de 223 millones de habitantes, y en dos importantes provincias de "inmigración", a saber, la provincia de Guangdong (en el delta del Río Perla) -en la que actualmente residen 31 millones de trabajadores migrantes en situación regular - y la provincia de Jiangsu (en el delta del Río Yangtze).

Las primeras actividades consistieron en aclarar el alcance de la trata o el tráfico de personas. No se trata simplemente del rapto y la venta de bebés con fines de adopción o de mujeres con fines de matrimonio, sino que abarca también a los migrantes voluntarios que no poseen ningún tipo de preparación o de información adecuada, lo cual puede degenerar en un tráfico de mano de obra con fines de explotación laboral.

La labor de sensibilización hecha hasta ahora consistió en incorporar el "tráfico de personas" en un manual sobre cuestiones de seguridad destinado a todos los niños de las escuelas de enseñanza primaria y secundaria elemental de la provincia de Anhui, y en un acuerdo sobre cuestiones laborales entre nueve provincias que abarca todo el delta del Río Perla. Más de 2.500 dirigentes de la federación de mujeres de la provincia de Henan recibieron una formación sobre la "gestión de la migración en condiciones de seguridad" para combatir el tráfico de personas.

En varias provincias, se organizaron actos masivos de sensibilización con motivo del Día Internacional del Migrante (18 de diciembre), el Día Internacional de la Mujer (8 de marzo), el Día Internacional del Niño (1.º de junio) y el Día Mundial contra el Trabajo Infantil (12 de junio). Se hicieron concursos de redacción de discursos, de dibujo y de caligrafía en los que participaron millares de niños; se celebraron actos a los que asistieron funcionarios gubernamentales que expresaron sus opiniones sobre las medidas que podrían resultar eficaces para luchar contra el tráfico de personas, y se contó también con una cobertura mediática local importante.

Gracias a la colaboración entre el proyecto CP-TING y la Federación de Mujeres de toda China (ACWF), el proyecto ha movilizado a varios ministerios competentes, tanto en el plano nacional como en las cinco provincias seleccionadas, con el propósito de elaborar una amplia serie de actividades destinadas a impedir la trata de niñas y de mujeres jóvenes, efectuar un seguimiento de los progresos logrados y documentar las enseñanzas extraídas.

Las organizaciones de empleadores y de trabajadores también se han comprometido a afrontar este problema. La Federación de Mujeres de Zhenjiang (provincia de Jiangsu) ha movilizado a las empresas para recaudar fondos destinados a brindar apoyo a las jóvenes migrantes menores de 16 años, que corren el riesgo de abandonar la escuela, a fin de que completen el ciclo de enseñanza obligatoria. Una empresa donó 120.000 RMB que fueron utilizados para financiar los estudios de 50 niñas sin recursos.

Hasta ahora, se han hecho más de 160 reportajes en los periódicos, la radio y la televisión de China sobre actividades relacionadas con el proyecto como, por ejemplo, reportajes con funcionarios del Gobierno que expresan su opinión sobre el tráfico de personas para concienciar a millones de lectores, oyentes y televidentes, con inclusión de las trabajadoras migrantes y los funcionarios del Gobierno.

Si bien se han hecho enormes progresos, quedan todavía muchos retos pendientes. Actualmente, en las provincias de emigración, los colaboradores del proyecto están preparando actividades de gran envergadura en nueve distritos seleccionados cuya población oscila entre 300.000 y un millón de personas. Los objetivos apuntan a la creación en las aldeas de redes de "alarma" sobre el tráfico de personas; la disminución de la deserción escolar prematura de las niñas; el aumento de la inscripción escolar de menores de 16 años, y el aumento de las posibilidades de formación profesional y de migración segura para las jóvenes de 16 años o más. En las ciudades de inmigración, se están creando servicios de colocación y mejorando el acceso a los servicios básicos.

El proyecto y sus colaboradores se proponen cada vez más ofrecer servicios de asesoramiento en materia de políticas a fin de contribuir a la concertación de acuerdos en materia de seguridad de la migración entre las provincias de emigración y de inmigración; procedimientos para otorgar licencias a las agencias de contratación y controlarlas, y un plan nacional de políticas para prevenir el tráfico de personas.

Por último, afirma Hans van de Glind, "Para cambiar la vida de las niñas que están expuestas al tráfico de personas necesitamos los esfuerzos concertados de las comunidades, los organismos gubernamentales, las organizaciones internacionales y de los programas y departamentos correspondientes de la OIT".