DÉFICIT DE TRABAJO DECENTE EN ASIA

Fecha de la publicación: 20 de diciembre de 2005 |
Si el video no aparece, instale gratuitamente RealPlayer™

Asia ha estado luchando por recuperarse de la crisis financiera que desestabilizó a la región cuatro años atrás. Pero esta recuperación está asentada en un terreno poco firme, pues la recesión económica global cada vez saca a más personas de sus empleos y las lanza a la incertidumbre. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) inaugura una conferencia de cuatro días en la región para apuntalar la recuperación, como lo explica OIT TV.

Para Rasamee Supa Aim, cada paso es un paso adelante en su camino personal hacia la recuperación. Aplastada cuando huía de un terrible incendio en la fábrica en la que trabajaba en Tailandia, está recobrando el uso de sus piernas y lleva su vida adelante, paso a paso.

Rasamee Supa Aim, trabajadora discapacitada

Tendré que comenzar de nuevo desde el principio. Debo estudiar y aprender a recuperarme de este accidente para vivir otra vez.

Su historia es un símbolo de Asia, pues una atmósfera de recuperación invade actualmente esta región. Incluso mientras los trabajadores se apresuran a ocupar los empleos creados por una economía global, el recuerdo de la crisis financiera está tan presente como los titulares del diario de hoy. Como un tigre desenfrenado, asoló una economía tras otra. Se perdieron 30 millones de empleos al evidenciarse dramáticamente el lado oscuro de la globalización.

Las redes de seguridad social, en aquellos lugares en los que existían, se derrumbaron por la presión. Pocos países tenían un seguro de desempleo. La miseria financiera y humana atravesó más fronteras a medida que la crisis destrozaba el delgado tejido de los derechos de los trabajadores.

Según un reciente informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la crisis asiática fue un catalizador para el cambio, pero continúa el déficit de empleos decentes. El desempleo aumenta. La protección social representa menos del 10 % del PIB en la mayoría de estos países. Los estándares de seguridad, especialmente en la agricultura y en las pequeñas empresas, deben recibir más atención. La conciencia de los derechos de los trabajadores está más difundida, aun cuando su reconocimiento es desigual. El trabajo informal, ocasional y por cuenta propia aumenta. Pero la pobreza, que afecta a 700 millones de personas en la región, es el mayor reto.

Amartya Sen, Premio Nobel

Si hay hambre y pobreza en el mundo, las causas principales de la pobreza y del hambre son del ámbito de la OIT. Se trata realmente de manejar el bien principal que tienen todos los seres humanos, esto es, la capacidad de trabajar y de laborar y, por tanto, el papel que desempeña la OIT es fundamental en este aspecto.

La OIT desarrolla actualmente actividades en la región, patrocinando proyectos como aquel que rescata a los niños que cosen balones de fútbol en Pakistán, o facilitando microcréditos a los antiguos trabajadores que tenían una servidumbre por deudas en Nepal. Ofrece asistencia técnica en países como Camboya y mediación política para poner fin al trabajo forzado en Myanmar.

En su próxima reunión regional en Bangkok, la OIT se centrará en el análisis de maneras de reducir el déficit de empleos decentes en Asia. El alto crecimiento del Asia oriental ha llevado a la creación de empleo. Pero el crecimiento es sostenible únicamente cuando va aparejado con la capacitación. Los objetivos propuestos son llegar a aquellas personas que se encuentran en el sector informal y propiciar las pequeñas empresas, el respeto por los derechos de los trabajadores, y el diálogo social, eliminar el trabajo infantil y el trabajo forzado, asegurar el acceso a la protección social en el hogar y en el lugar de trabajo. Todos estos elementos son esenciales para un trabajo decente y una recuperación sostenible.