Inspectores del trabajo: los asesinatos ocurridos en 2004 ponen en evidencia la necesidad de tomar medidas preventivas
El año pasado los titulares de los diarios registraron el asesinato de dos inspectores del trabajo Francia y de otros tres en Brasil. Según la OIT estos dramáticos casos constituyen apenas la punta del iceberg de los problemas relacionados con la inspección laboral. La semana pasada una conferencia de alto nivel entre la OIT y la Unión Europea destacó la necesidad de reforzar esta actividad que lleva a la práctica el derecho a trabajar en condiciones dignas.
GINEBRA – Centenares de inspectores del trabajo de Francia salieron a las calles en septiembre de 2004 para protestar por el asesinato de dos de sus colegas, alcanzados por los disparos de un agricultor de Dordogne, donde tenían la misión de revisar los contratos de empleados temporales en su granja.
El director del Programa de Seguridad y Salud en el Trabajo (SafeWork), Jukka Takala, comentó que en Brasil, por ejemplo, no es raro el uso de la violencia física contra los inspectores del trabajo. Los inspectores del Ministerio del Trabajo de ese país suelen viajar a las zonas rurales acompañados por oficiales de la policía federal brasileña. Y se cree que el asesinato de tres inspectores y del chofer del vehículo en que viajaban en enero de 2004 estuvo relacionado con una misión a una plantación de soya donde, según denuncias, había trabajo forzoso.
¿Significa que fue un mal año para la inspección laboral en el mundo? Los asesinatos de inspectores ciertamente no son frecuentes, pero las amenazas, la resistencia a los controles y los actos de violencia en su contra no son raros.
"La violencia y las actitudes de rechazo a la inspección del trabajo están aumentando. No se trata sólo de estos asesinatos en Brasil y Francia. Estas son señales de que existe un problema agudo", dijo Takala. "Está claro que los inspectores a veces portan un mensaje que puede no ser agradable cuando las condiciones laborales no están de acuerdo a las normas, pero uno no puede culpar a los mensajeros, no puede matar a la persona que trae las malas noticias".
Takala considera que la prevención es clave. "Si se actúa pronto para corregir los problemas lograremos reducir sus dimensiones. No podemos quedarnos esperando otro accidente industrial como los de Bophal, Chernobyl, Seveso o Toulouse. Debemos actuar ahora".
El Convenio Nro. 81 sobre la Inspección del Trabajo de la OIT ha recibido 134 ratificaciones, lo cual lo coloca como uno de los más aceptados entre los 185 Convenios de la Organización, y lo convierte en un instrumento fundamental para poner en práctica actividades de control. Pero los términos del Convenio no bastan por si solos para desarrollar una inspección del trabajo con los niveles de eficiencia requeridos en la actualidad.
"Es necesario abordar las inspecciones en forma creativa e integral para evitar futuros problemas y poner en práctica los derechos de los trabajadores a condiciones laborales dignas", comentó Gerd Albracht, especialista de la OIT en este campo. "El papel desempeñado por los inspectores del trabajo en el mundo moderno es el de garantizar la paz social al evitar accidentes y enfermedades en el lugar de trabajo".
En el lugar de trabajo los inspectores desempeñan un papel importante en la aplicación de las leyes y de las normas laborales fundamentales de la OIT. Pero es necesario fortalecer sus capacidades para ofrecer servicios calificados tanto a empleadores como a trabajadores en forma sostenible y coherente.
"Los derechos y deberes de los inspectores del trabajo merecen un amplio respaldo político por parte de gobiernos, empleadores y trabajadores", comentó Takala.
El aumento en las agresiones contra los inspectores requiere de acciones claras para prevenir futuros hechos de violencia. "La OIT ha apoyado y ha recibido con entusiasmo la iniciativa del Ministerio de Asuntos Sociales, Trabajo y Solidaridad de Francia para desarrollar una guía práctica sobre los derechos y deberes de los inspectores", comentó Takala. Destacó que se ha creado un equipo de trabajo multidisciplinario, en el cual la OIT está representada.
El programa de SafeWork también ha desarrollado un manual para capacitar a los inspectores de manera tal que contribuyan a reducir las tensiones y los temores de aquellos a quienes controlan. Este proyecto fue sometido a prueba en Bulgaria donde fue acompañado por una reforma que mejoró el rendimiento y la eficiencia de la inspectoría del trabajo de ese país.
Las experiencias en Bulgaria, Viet Nam, en países africanos y de otras regiones han servido, con apoyo financiero del Gobierno alemán, para el desarrollo por parte del programa SafeWork de un Sistema Integrado de Capacitación para la Inspección del Trabajo, que incluye el intercambio de buenas experiencias entre diferentes países.
"Es importante dejar claro que la inspección del trabajo no es solamente una herramienta técnica. Se trata también de una actividad que puede impulsar reformas y un instrumento poderoso para promover el cambio y la innovación en el campo de la salud, la seguridad y el diálogo social en el corazón mismo de las empresas", planteó Takala.
El director regional de la OIT para Europa y Asia Central, Friedich Butler, destacó que la Organización y la Unión Europea van a desarrollar estrategias consistentes para abordar los desafíos de protección social, en particular aquellos relacionados con la protección laboral.
Durante la inauguración de la conferencia OIT-EU sobre "Unidad por encima de las diferencias: la necesidad de un sistema integrado de inspección del trabajo", Butler planteó que "una prevención efectiva de accidentes y enfermedades ocupacionales requiere una amplia participación de gobiernos, empleadores y trabajadores". Y añadió que "en el área laboral, la inspección del trabajo es un elemento clave para garantizar la protección social para todos".
El encuentro de Luxemburgo reunió a unos 200 representantes de trabajadores, empleadores y gobiernos, y a observadores de organizaciones internacionales y europeas, para discutir sobre el papel del inspector del trabajo como agente investigador, facilitador y controlador.
Los participantes en la conferencia concluyeron que en tiempos de globalización se requiere abordar el desafío de la inspección laboral en forma más creativa e integral, tomando en cuenta los cambios registrados en el mundo del trabajo y la aparición de nuevos riesgos y oportunidades.
Al concluir la conferencia también se desatacó la necesidad de reforzar los sistemas de inspección del trabajo en todo el mundo, en especial en países en desarrollo, en transición y en aquellos que son candidatos a incorporarse a la UE, y se propuso crear un programa conjunto OIT-UE para promover estos objetivos.
Los participantes pidieron a la OIT la creación de un servicio basado en internet para apoyar las tareas de inspección del trabajo, incluyendo un sistema de capacitación para funcionarios, herramientas que contribuyan al diseño de estrategias y el intercambio de buenas prácticas.