Francis Blanchard

Director General de la Organización Internacional del Trabajo, 1974-1989

Francis Blanchard (Francia) inició su carrera de funcionario internacional en 1947, a la edad de 31 años, cuando se incorporó a la Organización Internacional de Refugiados (OIR). Permaneció en la OIR hasta que cesaron sus actividades, y participó activamente en el establecimiento de sus dos organismos sucesores, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y el Comité Intergubernamental para las Migraciones Europeas (CIME). En 1951 se incorporó a la OIT, donde ocupó su primer cargo como Jefe Adjunto de la División de Recursos Humanos. En el ejercicio de sus funciones participó en las primeras actividades de cooperación técnica de la OIT en materia de formación profesional y recursos humanos, financiadas por las Naciones Unidas y la Organización Europea de Cooperación Económica (OECE).

En 1956, el Director General, David Morse, nombró al Sr. Blanchard para desempeñar las funciones de Director General Adjunto encargado de una amplia gama de actividades de investigación y de cooperación técnica en materia de asuntos económicos, seguridad social, recursos humanos, formación profesional, desarrollo de la gestión y otros temas. En el desempeño de ese cargo, contribuyó a la creación del Centro de Turín y a la formulación de su programa de trabajo. En 1964, tras la reorganización de la Oficina, se le asignó toda la responsabilidad de la labor de cooperación técnica de la OIT, que requería un contacto diario con el Programa de las Naciones Unida para el Desarrollo (PNUD), y la supervisión de las actividades de la Oficina relacionadas con la preparación y la ejecución de los programas financiados por el PNUD. También organizó y dirigió la labor de las oficinas exteriores, que habían comenzado a asumir progresivamente la responsabilidad de la cooperación técnica.

En 1968, el Sr. Blanchard fue nombrado Director General Adjunto encargado de la cooperación técnica y de las actividades sobre el terreno. Quedaron bajo su supervisión dos de las principales nuevas tareas de la OIT: la prestación de asistencia a los países en desarrollo y la planificación de la descentralización de las actividades de la Organización. En noviembre de 1973, el Consejo de Administración le nombró Director General, responsabilidad que había asumido el Dr. Ammar desde la trágica muerte de Wilfred Jenks.

Como Director General, el Sr. Blanchard supervisó la expansión de los programas de cooperación técnica en la OIT y, por consiguiente, cambió en cierta medida la imagen de la Organización. En ese momento, la Organización atravesó también por graves dificultades financieras que exigieron la reducción de los gastos. El Sr. Blanchard consiguió evitar que la OIT sufriera daños mayores cuando, a raíz de la crisis, se retiraron e la Organización los Estados Unidos (1977 1980), situación que conllevaba la pérdida de una cuarta parte del presupuesto. También luchó enconadamente por defender la universalidad de la Organización. Los Estados Unidos se reincorporaron a la OIT al comienzo de la administración Reagan. En 1983, China se reincorporó como Miembro activo y, de este modo, al tiempo que aumentaban considerablemente las responsabilidades de la Organización en Asia, la universalidad de la OIT pasó a ser una realidad.

Durante ese período, la OIT prosiguió con resolución su labor en defensa de los derechos humanos. Por ende, la Organización desempeñó una importante función en la emancipación de la dictadura en Polonia, al brindar su pleno apoyo a la legitimización del Sindicato Solidarnosc sobre la base del respeto al Convenio núm. 87 sobre la libertad de asociación, que Polonia había ratificado en 1957. Otro hito de su mandato como Director General fue la Reunión de Alto Nivel sobre el empleo y el ajuste estructural, celebrada en 1987. Fue la primera vez que el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional participaron de forma activa junto a los miembros del Consejo de Administración de la OIT, representantes de los gobiernos, de los sindicatos y de los empleadores. Debido a sus iniciativas personales y a su capacidad de liderazgo, la OIT y otros muchos organismos internacionales competentes han pasado a participar directamente en la elaboración de estrategias y la aplicación de políticas para erradicar la pobreza y mitigar los cambios sociales desfavorables dimanantes de la deuda internacional y el reajuste estructural.

Como Director General, el Sr. Blanchard, desplegó incansables esfuerzos para dar la máxima difusión posible a la filosofía de la Organización y para hacer extensiva sus actividades al sector informal. Se jubiló en 1989, tras prestar 38 años de servicios a la OIT. Francis Blanchard murió en Morges (Suiza) el 9 de diciembre de 2009.