Capítulo 5 - Fijación y ajuste de los niveles de salario mínimo

5.1 ¿Qué es un enfoque equilibrado y basado en datos fácticos?

Se considera que un enfoque es equilibrado cuando tiene en cuenta, por una parte, las necesidades de los trabajadores y sus familias y, por la otra, los factores económicos. Tal enfoque combina a la vez los factores sociales y los factores económicos con el fin de encontrar un nivel salarial que beneficie a los trabajadores y a la sociedad, sin producir efectos negativos. Un enfoque equilibrado es indispensable, dado que el salario mínimo es una herramienta redistributiva que tiene a la vez beneficios y costos.

Si el nivel establecido es demasiado bajo, los salarios mínimos tendrán poco efecto en la protección de los trabajadores y sus familias contra el pago de salarios indebidamente bajos o frente a la pobreza. Si el nivel es demasiado alto, habrá un escaso cumplimiento de los salarios mínimos fijados o éstos tendrán efectos adversos en el empleo.

El enfoque equilibrado del Convenio núm. 131 de la OIT

La adopción de un enfoque equilibrado es un aspecto destacado del Convenio sobre la fijación de salarios mínimos, 1970 (núm. 131), el cual establece en su artículo 3 que:

Entre los elementos que deben tenerse en cuenta para determinar el nivel de los salarios mínimos deberían incluirse, en la medida en que sea posible y apropiado, de acuerdo con la práctica y las condiciones nacionales, los siguientes:

a) las necesidades de los trabajadores y de sus familias habida cuenta del nivel general de salarios en el país, del costo de vida, de las prestaciones de seguridad social y del nivel de vida relativo de otros grupos sociales;

b) los factores económicos, incluidos los requerimientos del desarrollo económico, los niveles de productividad y la conveniencia de alcanzar y mantener un alto nivel de empleo.

Se entiende que estos criterios no son exhaustivos.

Si bien es cierto que los factores económicos pueden limitar los aumentos del salario mínimo, en otros casos pueden proporcionar una oportunidad para aumentar el salario mínimo por encima del nivel indispensable para satisfacer las necesidades mínimas de supervivencia de los trabajadores y sus familias.

¿Cómo se puede asegurar que la fijación del salario mínimo esté basada en datos fácticos?

Aun cuando la fijación del salario mínimo es siempre el resultado de un proceso político, que incluye, en principio, la celebración de consultas exhaustivas con los interlocutores sociales, el establecimiento de un nivel salarial mínimo debería reposar en datos fácticos. A este respecto, es útil definir criterios objetivos. La importancia de la recopilación de estadísticas y otros datos para los estudios analíticos se destaca en la Recomendación núm. 135 y en el Convenio sobre estadísticas del trabajo, 1985 (núm. 160).

Cuando los gobiernos y los interlocutores sociales están de acuerdo sobre los criterios básicos que se proponen utilizar para ajustar el salario mínimo, la negociación de los aspectos detallados puede llevarse a cabo dentro de un marco común. La disponibilidad de datos también permite que los efectos de la tasa salarial mínima sean observados cuidadosamente al transcurrir el tiempo.


Estos efectos, medidos en el marco de un proceso de observación y vigilancia, pueden servir luego para fundamentar la siguiente serie de decisiones que los responsables de las políticas aplicarán para reevaluar el salario mínimo.
Los datos utilizados para este propósito deberían ser oportunos y exhaustivos y estar desglosados por sexo. Con el fin de evaluar la incidencia del salario mínimo, o de simular los efectos que un aumento podría tener en la economía, es necesario disponer de datos lo más representativos de la economía como sea posible.