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7ª Reunión Regional Europea en Budapest Las repercusiones del envejecimiento sobre los mercados de trabajo y la reforma de las pensiones

Si bien los regímenes nacionales de pensiones instaurados en los países industrializados de todo el mundo figuran entre los grandes logros del siglo XX y se ha comprobado su eficacia para aliviar la pobreza entre los ancianos, es preciso introducir ajustes para poder mantener los niveles actuales de bienestar. El envejecimiento y sus repercusiones sobre los mercados de trabajo y los sistemas de pensiones constituyen uno de los principales temas que se han de examinar en la Reunión Regional Europea de la OIT, que se celebra en Budapest del 14 al 18 de febrero ( Nota 1). OIT en línea entrevistó a Emmanuel Reynaud, Director del Servicio de Políticas y Desarrollo de la Seguridad Social.

Artículo | 17 de febrero de 2005

OIT en línea: ¿Puede hacernos una breve reseña de los problemas relacionados con el envejecimiento y la reforma de las pensiones en la región europea?

Emmanuel Reynaud: La población de edad está creciendo rápidamente. En los últimos cincuenta años, la esperanza de vida en la región ha pasado de 63 a 73 años, y se prevé que llegue a 80 años alrededor del año 2050. Aunque la población de los países de Europa Occidental es la de más edad, la de los países de Europa Central, Oriental y de la CEI está envejeciendo con mayor rapidez.

En los países de Europa Central y Oriental, donde se había alcanzado la cobertura completa de las pensiones y los regímenes establecidos sirvieron para amortiguar los efectos de las crisis económicas de los primeros años del decenio de 1990, muchos países adoptaron reformas radicales, entre ellas la reducción del seguro social en favor de cuentas de ahorro individuales de gestión privada.

En la CEI, aunque la hiperinflación redujo los valores reales de las pensiones hasta mediados del decenio de 1990, los regímenes de pensiones fueron uno de los medios más fiables para prevenir la pobreza en los primeros años de la transición.

En Europa Sudoriental, millones de personas han quedado en la indigencia cuando los regímenes nacionales de pensiones se han visto sometidos a presiones financieras como resultado de una serie de factores, como la agitación política, los conflictos armados, la pérdida de empleos subvencionados, el fuerte endeudamiento exterior y los altos niveles de inflación, el crecimiento de la economía informal y el no pago de las cotizaciones.

OIT en línea: ¿Qué puede hacerse para evitar las amenazas que plantea el envejecimiento de la sociedad en Europa para la financiación de las pensiones?

Emmanuel Reynaud: La reforma de las pensiones sólo podrá hacer frente a las presiones demográficas si aumentan los niveles de empleo, sobre todo los de las mujeres y los jóvenes, y las personas de edad disponen de opciones viables para seguir trabajando. En este sentido, las reformas necesarias en toda Europa son similares: mayores incentivos dentro de los sistemas de pensiones para retrasar la jubilación; normas que faciliten la jubilación gradual; incentivos para que los trabajadores ahorren para su jubilación; y medidas de información pública para que se conozcan mejor las opciones disponibles.

Prolongar la vida laboral es una manera importante de aumentar los índices de empleo. Sin embargo, todas las medidas que se tomen con este propósito deben tener en cuenta las necesidades y los derechos de las personas de edad, sobre todo de las que han sufrido malas condiciones de trabajo, han cotizado durante mucho tiempo en los sistemas nacionales de pensiones o tienen problemas de salud. La prolongación de la vida laboral también requiere medidas complementarias que proporcionen una verdadera libertad de elección a los trabajadores de edad a la hora de decidir si quieren seguir trabajando o jubilarse.

OIT en línea: ¿Qué puede hacerse para superar los obstáculos con que se enfrentan las personas de edad en el mercado de trabajo?

Emmanuel Reynaud: Las actitudes estereotipadas hacia las personas de edad siguen siendo el principal obstáculo a su empleo; en este sentido, el papel de los empleadores es crucial. Una solución eficaz requiere una mayor participación de los trabajadores de edad en programas de formación y medidas para luchar contra la discriminación por razones de edad.

OIT en línea: Algunos países europeos han optado por regímenes privados de pensiones. ¿Qué puede hacerse para lograr una mayor sensibilización acerca de los problemas que aún tenemos que enfrentar?

Emmanuel Reynaud: La aparición de las pensiones privadas tiende a incrementar las desigualdades, y los altos costos de transición de los sistemas públicos de reparto a un régimen privado de capitalización plantean ciertas inquietudes acerca de las futuras pensiones. Una opción posible (tal como se ha llevado a cabo, por ejemplo, en Dinamarca, Países Bajos y Suecia) es el establecimiento de regímenes sectoriales gestionados conjuntamente por las organizaciones de empleadores y de trabajadores, que garantizan un alto nivel de cobertura, ya que se aplican a todos los trabajadores de los sectores de que se trata. Aunque la justificación original – que la privatización podría evitar una crisis de las pensiones causada por el envejecimiento de la población – no es admitida ya por ningún especialista, la privatización ha gozado de gran apoyo en muchos países de Europa Central, Meridional y Oriental.

OIT en línea: ¿Qué medidas pueden adoptarse para abordar los problemas de equidad, en particular en los regímenes privados de pensiones, respecto de las mujeres y los grupos de ingresos bajos?

Emmanuel Reynaud: La privatización ha generado una gran variedad de problemas que deben todavía resolverse. Entre ellos cabe citar los siguientes: la financiación de los regímenes públicos de pensiones, ya que las cotizaciones se desvían hacia la parte privatizada; las cuestiones de equidad, en particular con respecto a las mujeres y los trabajadores de ingresos bajos, sobre todo los de la economía informal, cuyas cotizaciones han sido escasas o nulas; los problemas administrativos, como el mantenimiento de registros individualizados, y las medidas para garantizar que los costos administrativos, actualmente muy elevados, se mantengan dentro de límites razonables a fin de no erosionar los ahorros.

La experiencia de Europa Occidental revela que, más allá de la cuestión de las reformas, es necesario supervisar y gestionar los sistemas de pensiones para garantizar su viabilidad y equidad a largo plazo.

OIT en línea: ¿Qué medidas pueden adoptarse para mejorar la transferibilidad de los derechos de pensión de los trabajadores que cambian de trabajo con frecuencia y, en el plano regional, los de los trabajadores migrantes?

Emmanuel Reynaud: En muchos países se ha manifestado firmemente la necesidad de introducir una pensión mínima adecuada y de mejorar la transferibilidad de los derechos de pensión, habida cuenta de las consecuencias que podrán tener en las pensiones futuras la movilidad del empleo, la aparición de formas atípicas de empleo y la migración internacional en busca de trabajo. La inmigración ofrece muchas posibilidades para mejorar los índices de participación en la fuerza de trabajo y la situación financiera de los sistemas de pensiones y de otros sistemas de seguridad social. Países como España y Grecia esperan que los inmigrantes generen una oferta adicional importante de mano de obra. La resolución de la Conferencia Internacional del Trabajo relativa a un compromiso equitativo para los trabajadores migrantes en la economía globalizada (2004) proporciona directrices para la mejora de las políticas de inmigración en el contexto del envejecimiento.

OIT en línea: ¿Qué medidas pueden adoptarse para garantizar que las decisiones vitales sobre la reforma del sistema de pensiones cuenten con un amplio apoyo, el cual es esencial para su aceptación en el conjunto de la sociedad?

Emmanuel Reynaud: Las actuales transformaciones sociales y económicas implican que los jubilados de mañana tendrán perfiles profesionales y circunstancias familiares muy diferentes de los actuales. Al reconfigurar las prestaciones, es especialmente necesario tener en cuenta las cuestiones de género, ya que las mujeres suelen salir perdiendo mucho en las actuales reformas de los sistemas de pensiones. Para que los regímenes de pensiones puedan atender las necesidades y expectativas de la sociedad y cumplan eficazmente sus objetivos de ofrecer seguridad financiera y social, todas estas cuestiones requieren una firme intervención gubernamental y el logro del consenso social a través de la estrecha participación de los interlocutores sociales y otras partes interesadas.

OIT en línea: ¿Qué puede hacer la OIT para promover la discusión y la acción respecto de las cuestiones relativas a la reforma de los sistemas de pensiones?

Emmanuel Reynaud: La necesidad de soluciones que combinen el empleo, la protección social y la promoción de los derechos y el bienestar de los trabajadores pone de relieve el papel clave que puede desempeñar la OIT en los procesos de reforma. El enfoque tripartito de la OIT, en el que tienen participación los gobiernos, los trabajadores y los empleadores, es importante en lo que se refiere a facilitar la búsqueda del consenso sobre una combinación viable de las reformas del mercado de trabajo y de las pensiones que cubra las necesidades y expectativas de la sociedad. Mediante la facilitación de orientaciones, el control del cumplimiento de las normas mínimas acordadas y la promoción del diálogo social, la OIT puede desempeñar un papel importante en los planos nacional y regional, sobre todo mediante su Campaña Mundial sobre Seguridad Social y Cobertura para Todos, que inició recientemente.


Nota 1 - Gestionar las transiciones: Gobernanza y trabajo decente, Informe del Director General, vol. II, Séptima Reunión Regional Europea, Budapest, febrero de 2005, Capítulo 5: Envejecimiento, participación en el mercado de trabajo y reforma de las pensiones.