Conferencia OIT-UE sobre inspección del trabajo, realizada del 9 al 11 de marzo de 2005 en Luxemburgo, destacó que la globalización hace necesarias iniciativas más creativas e integrales en este campo, y que las reformas económicas y sociales requeridas para enfrentar este proceso sólo serán exitosas si se cuenta con inspectorías del trabajo fuertes, competentes e independientes.

El Convenio Nro. 81 de la OIT sobre la inspección del trabajo es uno de los Convenios más ratificados de la Organización, y es un instrumento fundamental para promover y poner en práctica el Trabajo Decente. En sus conclusiones finales la Conferencia destacó que en todo el mundo es necesario reforzar las inspectorías del trabajo y sugirió incrementar la cooperación para avanzar en esa dirección en el marco de la asociación estratégica UE-OIT, incluyendo un programa financiado por la UE dirigido en especial hacia países en desarrollo, en transición o a los países que adhieren a la UE. El ministro de Trabajo y Empleo de Luxemburgo, François Biltgen, confirmó que su país tiene la intención de ratificar más de 20 Convenios de la OIT relacionados con la salud y seguridad laboral. Este es un ejemplo importante que otros países deberían imitar.

Véase el artículo de fondo Inspectores del trabajo: los asesinatos ocurridos en 2004 ponen en evidencia la necesidad de tomar medidas preventivas .