Declaración
Mensaje del Director General de la OIT con motivo del Día Mundial del Sida
Esta conmemoración del Día Mundial del Sida transmite la esperanza unánime de que el mundo puede poner fin al sida. Esta esperanza se vereforzada por los significativos progresos realizados en la prevención de nuevas infecciones y en el aumento del acceso de las personas infectadas por el VIH a tratamiento, atención y apoyo.
La OIT ha desempeñado plenamente el papel que le corresponde en este esfuerzo mundial mediante iniciativas parafomentar el reconocimiento del sida como una cuestión relacionada conel lugar de trabajo, la movilización de la acción en el mundo del trabajo y el fortalecimiento de la capacidad de los mandantes para adoptar políticas y respaldar programas eficaces.
Con todo, a pesar de los progresos realizados, todavía quedan desafíos por afrontar, ya que las enfermedades relacionadas con el sida siguenponiendo en peligro la vida de muchos trabajadores y de quienes dependen de ellos (familias, comunidades y empresas). La crisis económica y financiera actual que están experimentando muchos países industrializados y la subsiguiente desaceleración de las economías emergentes tiene repercusiones financieras para la estrategia “Llegar a cero”. Tenemos que preservar los logros alcanzados y, al mismo tiempo, concentrar nuestros limitados recursos en las regiones en las que es más necesario maximizar el impacto.
En este día, la OIT reafirma su compromiso de utilizar el lugar de trabajo como punto de partida para hacer efectiva la estrategia de "Llegar a cero nuevas infecciones por el VIH; Cero discriminaciones y Cero muertes relacionadas con el sida", en estrecha colaboración con sus mandantes: gobiernos, organizaciones de empleadores y de trabajadores, ONUSIDA, la sociedad civil —incluidas las personas que viven con el VIH— y todos los asociados para el desarrollo. El papel central de nuestros interlocutores sociales, facilitado por el uso del diálogo social, debería posibilitar que las políticas y programas en el lugar de trabajo contribuyan de forma significativa al logro de la estrategia “Llegar a cero”.
La recomendación de la OIT N° 200 sobre VIH/SIDA y el Mundo del Trabajo, junto con nuestro Código de Práctica, proporciona orientación adecuada respecto de acciones en el lugar de trabajo para “Llegar a cero”.
Estamos poniendo en marcha una campaña bajo el lema “Llegar a cero en el trabajo”. Los jefes de los organismos que cofinancian ONUSIDA y la Secretaría se han sumado a esta iniciativa, ya que reconocen la función esencial que el lugar de trabajo desempeña en la lucha mundial para frenar la propagación y los efectos de la epidemia.
Juntos, nos comprometemos a proteger los derechos humanos de las personas que viven con VIH, incluido el derecho al trabajo, que no es solo un derecho, sino parte integrante del tratamiento. Ahora, cuando el diagnóstico precoz y el acceso al tratamiento hacen posible que millones de personasque viven con VIH en todo el mundo sigan trabajando y tengan vidas largas y productivas, la estrategia de “Llegar a cero en el trabajo” adquiere mayor relevancia, sobre todo para los jóvenes. Los jóvenes representan más del 40 por ciento de lasnuevas infecciones por VIH que se producen cada año en todo el mundo. Estas cifras ponen en evidencia que, junto con velar por que los jóvenes puedan acceder a trabajos decentes, también tenemos que defender con firmeza que el hecho de ser seropositivo no debería ser un obstáculo para acceder al empleo.
«Llegar a cero» también implica abordar el problema de las desigualdades de género. Además de la carga que supone ocuparse de las personas que viven con VIH, las mujeres son víctimas de violencia y de desigualdades de ingresos que las hacen más vulnerables económicamente y obstaculizan su acceso a los servicios de salud. Es fundamental que los hombres se impliquen en estos esfuerzos encaminados a promover un comportamiento responsable en la salud sexual y reproductiva y a erradicar la violencia contra las mujeres.
El informe de ONUSIDA titulado “Juntos acabaremos con el sida”, publicado recientemente, es esperanzador. Si queremos acabar con el sida, la protección del sector más productivo de la sociedad debería ser el eje central de la respuesta frente al sida.
Aunemos nuestros esfuerzos para “Llegar a cero en el trabajo”.
La OIT ha desempeñado plenamente el papel que le corresponde en este esfuerzo mundial mediante iniciativas parafomentar el reconocimiento del sida como una cuestión relacionada conel lugar de trabajo, la movilización de la acción en el mundo del trabajo y el fortalecimiento de la capacidad de los mandantes para adoptar políticas y respaldar programas eficaces.
Con todo, a pesar de los progresos realizados, todavía quedan desafíos por afrontar, ya que las enfermedades relacionadas con el sida siguenponiendo en peligro la vida de muchos trabajadores y de quienes dependen de ellos (familias, comunidades y empresas). La crisis económica y financiera actual que están experimentando muchos países industrializados y la subsiguiente desaceleración de las economías emergentes tiene repercusiones financieras para la estrategia “Llegar a cero”. Tenemos que preservar los logros alcanzados y, al mismo tiempo, concentrar nuestros limitados recursos en las regiones en las que es más necesario maximizar el impacto.
En este día, la OIT reafirma su compromiso de utilizar el lugar de trabajo como punto de partida para hacer efectiva la estrategia de "Llegar a cero nuevas infecciones por el VIH; Cero discriminaciones y Cero muertes relacionadas con el sida", en estrecha colaboración con sus mandantes: gobiernos, organizaciones de empleadores y de trabajadores, ONUSIDA, la sociedad civil —incluidas las personas que viven con el VIH— y todos los asociados para el desarrollo. El papel central de nuestros interlocutores sociales, facilitado por el uso del diálogo social, debería posibilitar que las políticas y programas en el lugar de trabajo contribuyan de forma significativa al logro de la estrategia “Llegar a cero”.
La recomendación de la OIT N° 200 sobre VIH/SIDA y el Mundo del Trabajo, junto con nuestro Código de Práctica, proporciona orientación adecuada respecto de acciones en el lugar de trabajo para “Llegar a cero”.
Estamos poniendo en marcha una campaña bajo el lema “Llegar a cero en el trabajo”. Los jefes de los organismos que cofinancian ONUSIDA y la Secretaría se han sumado a esta iniciativa, ya que reconocen la función esencial que el lugar de trabajo desempeña en la lucha mundial para frenar la propagación y los efectos de la epidemia.
Juntos, nos comprometemos a proteger los derechos humanos de las personas que viven con VIH, incluido el derecho al trabajo, que no es solo un derecho, sino parte integrante del tratamiento. Ahora, cuando el diagnóstico precoz y el acceso al tratamiento hacen posible que millones de personasque viven con VIH en todo el mundo sigan trabajando y tengan vidas largas y productivas, la estrategia de “Llegar a cero en el trabajo” adquiere mayor relevancia, sobre todo para los jóvenes. Los jóvenes representan más del 40 por ciento de lasnuevas infecciones por VIH que se producen cada año en todo el mundo. Estas cifras ponen en evidencia que, junto con velar por que los jóvenes puedan acceder a trabajos decentes, también tenemos que defender con firmeza que el hecho de ser seropositivo no debería ser un obstáculo para acceder al empleo.
«Llegar a cero» también implica abordar el problema de las desigualdades de género. Además de la carga que supone ocuparse de las personas que viven con VIH, las mujeres son víctimas de violencia y de desigualdades de ingresos que las hacen más vulnerables económicamente y obstaculizan su acceso a los servicios de salud. Es fundamental que los hombres se impliquen en estos esfuerzos encaminados a promover un comportamiento responsable en la salud sexual y reproductiva y a erradicar la violencia contra las mujeres.
El informe de ONUSIDA titulado “Juntos acabaremos con el sida”, publicado recientemente, es esperanzador. Si queremos acabar con el sida, la protección del sector más productivo de la sociedad debería ser el eje central de la respuesta frente al sida.
Aunemos nuestros esfuerzos para “Llegar a cero en el trabajo”.